Entre su ardiente tierra y su cálida gente me movía en un ligero deslizar de ensueño. Y ahí estaba ella de pie mirando al horizonte y yo buscando un panorama más vertical desde sus tobillos hasta su cintura, siguiendo el camino de su cuello hasta el infinito índigo de la bóveda que nos cubría. Su piel levemente morena, como apenas tostada por el sol y sus ojos rasgados como pincelada de una verde acuarela me llamaban hacia ella.
Inerte se mantenía mirando un horizonte de planos fundidos donde el mar y las nubes formaban una masa que flotaba a lo lejos. Y al acercarme para tocarla, ella parecía desvanecerse en aquel atardecer; sus pies se transformaban en arena y su pelo se mezclaba con la cada vez más inminente oscuridad del cielo.
Así es Brasil; indomable, inalcanzable y apasionante Brasil.
Por lo mientras, me conformo con saber que esta noche tengo una cita para volverte a ver, así por lo menos hasta que al fin llegue nuestro momento de encontrarnos.
y era tall and tan and yougn and lovely? ;)
Todo eso y más seguro es Brasil.
Muy bien, realmente estas pensando ir a Brasil?.
Como quiera que sea, así como lo describes, se me antojó ir también